El centro de mesa navideño debe ser especial y requiere que la creatividad juegue un papel protagónico. Como sabemos la Navidad es la época más bella y es el momento de reunión de la familia, para celebrar un año más del nacimiento del niño Dios y el legado de amor y esperanza que trajo al mundo. El día más esperado para disfrutarlo en compañía de nuestros seres amados. Es un momento donde la gratitud se apodera de nuestro corazón y la felicidad se rebosa al ver a nuestra familia unida y con los valores que hemos ido sembrando en ellos.
Ideas para el centro de mesa navideño
Una de las claves para la decoración de la mesa de Navidad es el centro de mesa navideño que escojas. Algo que podrías hacer tu misma. «DIY». Por ejemplo: podrías sobre una bandeja colocar ramas de pino natural y muchos piñones hasta cubrirla. Abre espacio entre las ramas y complementa con unos candelabros bajos de vidrio con velas altas de color rojo como los de la foto. En el medio podrías lucir otro candelabro con una vela a una altura más baja y del mismo tono. Rocía sobre los piñones y las ramas de pino un poquito de spray que imite la nieve. Finalizando, agrega unos cordones de bolitas rojas para enriquecerlo. Un centro de mesa navideño como este es bello, fácil e ideal para una mesa de cuatro comensales.
Centro de mesa navideño: Tazas rojas y blancas con ramitas de pino
Otra idea es colocar como centro de mesa navideño algunas tazas con ramas de pino mezcladas con cerezas rojas. También es muy sencillo y lo puedes hacer en casa. Lo importante es combinar los colores de las tazas con la vajilla y los platos de fondo como los de la foto. Lograrás decorar la mesa de navidad preciosa y original, sin gastar mucho dinero.
Dorado, blanco y rojo
Si la tuya es redonda, podrías poner como centro de mesa navideño un florero o una base de vidrio transparente. Llénala de frutas disecadas y pintadas con spray dorado, y combínalas con bolas blancas, como las de la foto. Cubre la mesa con un mantel blanco y complementa la decoración con unos pequeños candelabros dorados y un farol con una vela roja para romper la hegemonía. Están super IN y le dan calidez y un toque distinto.
Los niños son el verdadero centro de la Navidad
Los niños son los verdaderos protagonistas de la Navidad. Hacer la mesa de Navidad con ellos será una actividad que los mantendrá entretenidos y quedará siempre en sus recuerdos. Con tus chiquitos podrías hacer una casita de pan de jengibre decorada con glaseado y pastillaje de centro de mesa navideño. Acompáñala con velas de distintas alturas. Llegado el momento de la cena, prende las velas y disfruta el momento con tus seres queridos.
Guirnaldas largas para mesas rectangulares
En caso de que tu mesa sea rectangular lo ideal es un centro de mesa navideño a lo largo. El de la foto es muy sencillo. Se hizo con una guirnalda rociada con spray imitando nieve, y se decoró con bases de vidrio transparentes y velas blancas. Acompañan la decoración algunos piñones, y ramas de cerezas rojas. El mantel del mismo color sirve como base de esta decoración navideña. Sobre la vajilla están las servilletas de tela blancas luciendo un detalle muy delicado. Pequeñas campanas rojas en perfecto equilibrio, añaden belleza y alegría a la decoración.
Centro de mesa navideño con velas y ramas de pino
Los espacios pequeños requieren de gran imaginación, Un sideboard puede convertirse en una mesa auxiliar. Su decoración es muy sencilla. Necesitas un camino de mesa que haga las veces de mantel y caiga a los lados como el de la foto. Como centro de mesa navideño se escogió una bandeja blanca. Ella está decorada con una vela dorada y un arlequin, vestido con los colores de la Navidad. Además hay manzanas rojas, unos piñones y un tronco cortado que complementan el adorno. En consonancia, un par de candelabros con velas rojas flanquean el centro de mesa navideño.
Para concluir la mesa siempre será el centro de reunión de la familia y las amistades. Tus seres amados estarán felices y sorprendidos con cada detalle que hagas para ellos y tu corazón se sentirá infinitamente bendecido y agradecido de tener una familia y buenos amigos con quien compartirla.