Controlar los nervios es una necesidad en medio de tanta incertidumbre y preguntas sin repuestas debido a la pandemia. ¿Estamos fuera de peligro del COVID 19? ¿Hemos llegado a la etapa endémica? ¿Deberíamos adoptar la mentalidad de que el virus es sólo una parte de nuestras vidas ahora y continuar como siempre?
Muchas personas están caminando con más preguntas que respuestas, a medida que surgen nuevas variantes del COVID, y los recuentos de casos continúan fluctuando.
Sin una respuesta definitiva sobre cómo serán las próximas fases de la pandemia, la fatiga mental se ha apoderado de muchos durante este limbo de COVID, al igual que la ansiedad, la depresión y la ira persistente. Han pasado más de dos años desde el comienzo de la pandemia y por supuesto, la gente está frustrada y ansiosa, dice Patrick Bigaouette MD, psiquiatra del Sistema de Salud de la Clínica Mayo en Mankato. Como el número de casos del COVID 19 vuelve a subir, la gente está naturalmente nerviosa. Se preguntan si está bien ir al cine, enviar a su hijo a la escuela o la posibilidad de que aumenten las políticas públicas relacionadas con COVID.
Controlar los nervios es parte de una buena salud mental
La sensación recurrente de ansiedad puede ser mentalmente agotadora. Las investigaciones han demostrado un aumento de la frustración, la agitación y la ira a lo largo de la pandemia de COVID 19. La ira pandémica o “panger” es un problema de salud mental general con el que muchas personas están lidiando. Sentir estas emociones es una respuesta perfectamente natural, sin embargo, queremos ayudar a las personas a sobrellevar éstas y responder de manera saludable, dice el Dr. Bigaouette.
Gritar a los demás, criticar la situación o cerrarse puede afectar negativamente la salud, el trabajo y las relaciones personales. Aquí hay algunas ideas que pueden ayudarte a responder más efectivamente al panger (ira pandémica), en lugar de simplemente rectificar.
- Retrocede y observa.
- Respira hondo y presta atención a lo que sucede en el momento sin juzgar, ni evaluar tu experiencia.
¿Notas frustración e ira en tu cuerpo, como opresión en el pecho, aprietas la mandíbula o los puños, o sientes calor? Puedes notar una urgencia o impulso de acción, como la urgencia de gritar o huir. El simple hecho de disminuir la velocidad y observar el enojo puede hacer que parezca menos abrumador y ayudar a crear un espacio entre tu enojo y lo que harás a continuación. Permite que el “enojo” esté presente.
Controlar los nervios: Aceptar la ira es una elección activa
Las personas a menudo tratan de evitar deshacerse de las experiencias internas desagradables. Incluidos los pensamientos, las emociones y los recuerdos. Con la ira, la tendencia a evitar puede dar lugar a varias reacciones automáticas que no siempre son útiles y que incluso pueden aumentar la ira con el tiempo.
Por ejemplo: arremeter contra alguien puede hacerte sentir mejor en ese momento. Pero a menudo no ayuda a largo plazo e incluso puede hacerte sentir peor, como sentirte culpable por gritarle a tus hijos o a un compañero de trabajo.
Escucha el mensaje de la ira sobre lo que valoras. Elige, permite que la ira junto con los pensamientos, las emociones, las sensaciones físicas y los impulsos asociados estén presentes sin tratar automáticamente de evitarlos o deshacerte de ellos; crea libertad y flexibilidad para elegir acciones efectivas y significativas.
Aceptar la ira es una elección activa, no una resignación pasiva. No significa que estés aceptando la situación que puede haberte enfadado o que estás renunciando a lo que te importa. Significa que estás eligiendo poner energía en una acción efectiva en lugar de concentrarte únicamente en tratar de controlar lo incontrolable.
Las personas seguirán teniendo desacuerdos sobre la Pandemia
Una vez que hayas llegado a escuchar el mensaje que te envía la ira, elige tu siguiente acción eficaz. Es posible que no puedas controlar lo que otros dicen y hacen, ni tampoco lo que piensan y sienten, pero puedes controlar los nervios y como respondes a las situaciones. Las personas seguirán teniendo desacuerdos sobre el distanciamiento social y las reuniones, con políticas publicas relacionadas con la pandemia, las restituciones laborales y cualquier otra situación relacionada con la pandemia, dice el Dr. Bigaouette.
Hay muchas cosas fuera de nuestro control durante estos tiempos inciertos. Y nuestros sentimientos relacionados con las experiencias son naturales y apropiados. Solo queremos asegurarnos de que estamos lidiando con nuestras emociones de manera saludable.
La investigación ha demostrado un aumento en la frustración, la agitación y la ira a lo largo de la pandemia de COVID 19. La ira pandémica (o panger) es un verdadero problema de salud mental con el que muchas personas están lidiando.
Ref: Patrick Bigaouette MD, psiquiatra del Sistema de Salud de la Clínica Mayo en Mankato, MN
Dr Isidoro Bronstein
Medicina Preventiva y Longevidad