¿Cómo saber si tienes obesidad?
Un estilo de vida sedentario o bien, frenético, nos puede llevar a alterar hábitos de vida como es la alimentación, incorporando nutrientes poco saludables que acaban afectando nuestro peso y que tienen otro tipo de consecuencias nocivas en nuestra salud, como la obesidad, entre otras.
Este confinamiento por el Covid 19 es proclive a producir cambios de estilo de vida en muchas áreas. Entre otras cosas tendemos a ser más sedentarios y a comer más, sobre todo cosas que engordan y facilitan el camino a la obesidad. No obstante, la mejor manera de prevenir el sobrepeso, la obesidad y todas las enfermedades asociadas a estos problemas es mantener un estilo de vida saludable, cumpliendo hábitos sencillos que ayuden a conseguir entre nuestros objetivos, el peso ideal.
La obesidad y sus causas
Por definición la causa fundamental del sobrepeso y la obesidad es un desequilibro energético entre calorías consumidas y gastadas. No obstante, aunque no lo parezca, este es un tema complejo, en tanto son varias y diversas las causas que llevan a este desequilibrio.
Poca actividad física y sedentarismo
El sedentarismo y la falta de deporte son sólo una de las muchas causas de este problema, a pesar del conocimiento generalizado de los múltiples beneficios que se obtienen al realizar actividad física. Se sabe que la actividad física puede mejorar el control de enfermedades como la Diabetes, Hipertensión Arterial, Dislipidemias, también puede mejorar el índice de Colesterol HDL (comúnmente conocido como el bueno); disminuye los triglicéridos, aumenta la eficiencia del oxígeno, baja la frecuencia cardíaca en reposo y por lo tanto mejora la respuesta al ejercicio sub-máximo; previene la osteoporosis sobre todo en las mujeres.
El ejercicio no solo tiene beneficios físicos sino también psicológicos. Aporta una mejor respuesta psico-social y fisiológica al estrés, mejora la autoestima, la auto-imagen y auto-aceptación y por lo tanto mejora las perspectivas.
Alimentación poco saludable
El control de la alimentación es fundamental para mantener un peso óptimo y evitar el sobrepeso, la obesidad. La alimentación poco saludable, el exceso de grasa, comida rápida y azúcares conduce irremediablemente al sobrepeso.
Se recomienda realizar entre cuatro y cinco comidas al día para evitar tener excesiva hambre en las principales comidas; sobre todo en la cena. Las comidas entre horas deberían ser alimentos bajos en grasas saturadas, pero que a la vez sacien el apetito, como los frutos secos, frutas o lácteos.
El consumo de ensaladas y verduras debería ser diario y para evitar el grave problema de la obesidad infantil, los padres deben dar ejemplo y consumir con los niños productos saludables. Las frutas deberían ser un producto muy visible en la cocina o comedor.
Para empezar a adquirir buenos hábitos es aconsejable escribir menús equilibrados, evitar ir a los restaurantes de comida rápida y la ingesta de grasas saturadas. Los buenos hábitos a la larga aportan muchos beneficios tanto físicos como psicológicos.
La obesidad y el factor genético
La obesidad es una enfermedad compleja y multifactorial, producto de factores genéticos, conductuales y ambientales. La predisposición a la obesidad es bien común entre individuos genéticamente relacionados, ya que es el factor más importante.
Según los investigadores, averiguar qué genes influyen en el lugar donde se deposite la grasa, ayudaría a entender la biología de la resistencia a la insulina, el síndrome metabólico y las enfermedades del corazón. Se trata de un primer paso para identificar los genes adicionales que afectan la obesidad.
En el futuro algunos de estos genes pueden ser buenos objetivos para el desarrollo de fármacos.
Enfermedades y medicamentos administrados periódicamente
Las enfermedades causadas por el exceso de peso son: Enfermedad Coronaria, Diabetes Tipo II, (cáncer de endometrio, mamas y colon), Hipertensión Arterial, Dislipidemia, Accidentes Cerebrovasculares, Enfermedad del Hígado, de la Vesícula, Apnea del Sueño, Artrosis, Problemas Ginecológicos e Infertilidad además de Problemas Respiratorios. No obstante, el aumento de peso puede ser inducido por fármacos: Corticoides, Antidepresivos, Antiepilépticos, Terapia Hormonal, Betabloqueantes y Esteroides ingeridos en forma continuada durante un período largo de tiempo.
Consecuencias de la obesidad
El aspecto físico es sólo una de las muchas consecuencias del sobrepeso, pero conlleva problemas psicológicos y discriminación social por el estado corporal. Esta exclusión se manifiesta en varios ámbitos como: educativos, laborales, sanitarios, accesos a servicios y transporte. Según la OMS la obesidad casi se ha triplicado en todo el mundo.
Trastornos músculo esqueléticos
El exceso de peso corporal provoca un estrés de carga más elevado que repercute a niveles osteo-musculares y articulares provocando deformidades en las piernas, procesos inflamatorios y degenerativos.
Baja autoestima y obesidad
Las personas más propensas a sufrir baja autoestima, sobre todo a temprana edad, tienden a padecer de obesidad o sobrepeso en la edad adulta.
¿Qué es el IMC? (indice de masa corporal)
Es un indicador simple que se utiliza para calcular el sobrepeso y la obesidad en los adultos, común para hombres y mujeres. Se calcula dividiendo los kilogramos de peso por el cuadrado de la estatura en metros. (IMC = peso en kg/ estatura en m2) Después de haber hecho el cálculo si la cifra obtenida está por debajo de 18,5, el peso es insuficiente. Si se encuentra entre 18,5-24,9 se considera peso normal. Si está entre 30-34.9 obesidad Tipo I; entre 35-39.9 Obesidad Tipo II; entre 40 y 49 Obesidad Tipo III (mórbida). Mayor a 50 Obesidad Tipo IV (extrema).
Dieta personalizada
Si tienes sobrepeso, obesidad, y quieres adelgazar lo más recomendable es realizar una dieta personalizada ya que cada metabolismo procesa los nutrientes de diferentes formas. Las dietas personalizadas requieren de estudios detallados teniendo en cuenta múltiples factores, no sólo del cuerpo humano sino sociales como horarios de comida, gustos o preferencias, o prácticas religiosas que pueden inferir en el mantenimiento de la dieta.
Por todo lo antes expuesto se puede concluir que el promedio de vida en personas obesas es menor que en aquellos que no lo son. ¿Quieres vivir largo tiempo y en buenas condiciones? Envejecer sin envejecer? Evita la obesidad
Dr Isidoro Bronstein
Medicina Preventiva y Longevidad