Aceite de Ricino: 3 Formas de Aprovechar sus Propiedades de Belleza

El aceite de ricino es uno de los secretod de belleza natural más usado por nuestras abuelas. Es ideal para devolver el brillo y la hidratación a la piel y al cabello.

El aceite de ricino es uno de esos secretos naturales de belleza con múltiples beneficios. Te revelamos los mejores para tu piel y cabello.

Detalles sobre el aceite de ricino

El aceite de ricino proviene de las semillas de una planta originaria de África e India, llamada ricinus communis. En su estado natural, son tóxicas. Deben ser tratadas para hacerlas seguras y desatar sus propiedades (Funes, 2020).

Este aceite está compuesto en su mayoría por ácidos grasos esenciales. Principalmente, ácido ricinoléico: un tipo de omega-9 (Funes, 2020). Además, concentra proteínas y vitamina E (Betancourth, 2020).

El ricino tiene propiedades humectantes, restauradoras, emolientes y promotoras del crecimiento celular (Funes, 2020). Así mismo, combate las bacterias y la inflamación (Betancourth, 2020).

Tres usos líderes del aceite de ricino en belleza

Estos son los mejores usos y beneficios del aceite de ricino para el cuidado personal.

Limpieza de la piel

Es eficaz para eliminar suciedad y residuos de otros productos, como cremas, maquillaje o fragancias. Limpia profundamente los poros sin resecar o irritar la piel (Funes, 2020).

Con frecuencia, se recomienda usarlo en conjunto con un aceite más ligero, como el de jojoba o albaricoque. Masajea suavemente la mezcla sobre tu rostro para disolver grasa, productos e impurezas. Retíralo con un paño suave húmedo, idealmente con agua tibia (Moreno, s.f.).

Es aconsejable utilizarlo tres veces por semana solamente para evitar el riesgo de obstruir los poros (Funes, 2020).

Hidratante y antiarrugas

Los ácidos grasos esenciales y la vitamina E en el aceite de ricino lo convierten en un potente hidratante. De igual manera, su capacidad de estimular la producción de elastina y colágeno resulta en una piel más tonificada y con mejor elasticidad. Así, contrarresta signos del envejecimiento como las arrugas y la flacidez (Funes, 2020).

Por ello, es un ingrediente frecuente en productos cosméticos para combatir estas señales del envejecimiento de la piel (Moreno, s.f.).

Cuidado del cabello

Aplicar ricino en el cuero cabelludo promueve la circulación de la sangre en la zona. Esto contribuye al desarrollo de nuevos folículos pilosos y, en consecuencia, al crecimiento del cabello (Funes, 2020). Masajéalo durante unos minutos y retíralo con agua y champú. Idealmente, hazlo antes de dormir para dejarlo actuar durante la noche (Moreno, s.f.).

Por otro lado, ayuda a mantener el cabello fuerte, sano y sin puntas abiertas. ¿Cómo? El omega-9 es capaz de penetrar profundamente en la fibra capilar y la sella (Funes, 2020). Para ello, haz una mascarilla de ricino en el cuerpo y puntas de tu cabello regularmente (Moreno, s.f.).

Utiliza aceite de ricino para devolverle a tu pelo el brillo, la suavidad y la hidratación. Este remedio natural también es excelente para el crecimiento del cabello y las pestañas.

Su poder de crecimiento también lo hace ideal para poblar cejas y pestañas. Basta con usar un par de gotas y masajear suavemente y con cuidado la raíz del vello hasta que se absorba. Cuida que no entre a tus ojos (Moreno, s.f.).

Es así como el aceite de ricino aporta al cuidado de tu piel y cabello. No sólo es efectivo, sino fácil de obtener y de utilizar en tu rutina de belleza. ¡Aprovéchalo!


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