¿Has consultado algo con la almohada? Muchas veces los sueños son de gran ayuda a la hora de buscar soluciones o respuestas. Si sientes que no descansas lo suficiente, a lo mejor un cuarto color blanco te ayudará con esa relajación que necesitas antes de dormir.
¿Quieres saber cómo? Sigue leyendo y aprende pequeños tips que seguramente te ayudarán a mejorar tu descanso.
Color blanco para un dormitorio
¿Sabías que el cerebro nunca para, incluso cuando estamos durmiendo? Nicholas Humphrey, un profesor de psicología en la Universidad de Nueva York que ha estudiado el efecto de los sueños, considera que dormir nos hace más empáticos, nos ayuda a crear historias, resolver problemas y a ser más creativos.
Dormir es además necesario para la salud. Según el doctor Juan Pareja Grande, responsable de la Unidad del Sueño del Hospital Universitario Quirón Madrid, las consecuencias de no dormir van desde cansancio y somnolencia, hasta infartos y enfermedades cerebrovasculares.
Ahora bien, ¿qué tiene que ver el color blanco en todo esto? Resulta que el blanco te ayudará a conciliar el sueño y a tener un descanso más profundo. De acuerdo a la psicología del color, inspira pureza y pulcritud. Aplícalo en tu decoración, combinándolo con la gama de los bambú para crear un ambiente sereno y acogedor. ¡Justo lo que necesitas en este momento!
Ten en cuenta que si antes de dormir lo que ves son colores asociados al peligro, o a la fuerza, como el rojo, naranja y amarillo, tendrás más dificultades para conciliar el sueño. Por eso, lo mejor es que lo último que percibas sea el color blanco, ya que está asociado a la tranquilidad y la paz.
¿Cómo usar el color blanco en el dormitorio?
Sé que estás pensando que el color blanco es el que más se ensucia. Sin embargo, hay piezas que te ayudarán a lograr una habitación armoniosa sin mucho esfuerzo ni muchos cuidados. Esto son algunos consejos que puedes poner en práctica:
- Cortinas blancas; procura que bloqueen la luz, de esta manera no tendrás ninguna iluminación que te perturbe por la noche.
- Gavetero de madera pintados de blanco. Con técnicas de envejecimiento, los muebles pintados en este color aportan serenidad y un aspecto vintage a la decoración.
- Mesitas de noche blancas, que bien pueden ir a juego con el gavetero, o más bien de estilo minimalista.
- El rosa pálido o lila son otros tonos que transmiten serenidad. Puedes incluirlos en algunos accesorios como un florero o en las flores mismas..
¿Quieres ver tu cama y que te provoque acurrucarte en ella? También puedes usar lencería color blanco. Un edredón o plumón acolchado y almohadas grandes serán la mejor bienvenida a sueños placenteros.
Incluye texturas y colores claros
Para incorporar otro colores, escoge tonalidades rosas, grises o pasteles cuyo aporte será similar al color blanco. Por ejemplo, el gris o color plata, se asocia a la serenidad del reflejo de la luna y los tonos rosa pálido a lo femenino, a la inocencia, a la fantasía y ayudan a calmar los nervios. Velas, alfombras y un par de lámparas suspendidas sobre las mesas de noche en tonos serenos, son algunos accesorios que contribuyen con la paz del espacio.
¡También podrías texturizar las paredes y darle personalidad a tu cuarto! Pinta tu habitación toda de blanco para aumentar la sensación de amplitud y en una de las paredes aplica alguna técnica de texturizado en un tono beige o pastel. Con esponjas o rodillos lograrás buenos resultados decorativos.
Y para darle un toque más natural a la habitación recuerda las plantas. Según el Feng Shui, reducen el estrés y mejoran las energías.
Por último, recuerda que tu cuerpo necesita de 7 a 8 horas diarias de sueño para estar sano. Aplica estas ideas en tu dormitorio y lograrás ese descanso profundo que tanto te mereces.