Para conservar la amistad lo primero que debemos tener en cuenta es lo privilegiados que somos al contar con un verdadero amigo/a. Tener un amigo significa dar y recibir amor, compromiso solidario, sinceridad, lealtad, reciprocidad, y todo tipo de afecto entre dos o más personas que la cultivan.
La amistad surge entre gente conocida, sin distinción de clase social o de creencias religiosas. Puede presentarse entre personas de diferentes ideologías políticas, culturales e idiomas variados. A veces aparece en los sitios y en los momentos menos esperados y entre personas muy diferentes.
Cuando conseguimos un amigo/a debemos hacer todo lo que esté a nuestro alcance para cuidar esa hermosa amistad. Esa persona a quien llamamos amigo/a también debe entender la importancia de conservar la amistad con alguien como tú. La amistad es un gran valor en el desarrollo de nuestra vida diaria. No traicionarla es un compromiso que debemos hacer para que esa bella y sincera amistad dure por siempre.
3 tips para conservar la amistad
- La amistad hay que nutrirla, haciendo que se fortalezca cada día. No debe conocer la envidia; al contrario, debe celebrarse el crecimiento y los logros del amigo/a.
- Mientras más se fortalezca, se hará más duradera y efectiva. Los amigos deben entender las posibles equivocaciones en que se puedan caer y están para ayudar a superarlas.
- La franqueza en los diálogos es fundamental en el fortalecimiento de la amistad. El respeto mutuo y la lealtad jamás deben perderse.
Evita a quienes te hacen daño
Hay amigos que NO son verdaderos. Ellos se aprovechan de ti o buscan perjudicarte, señalando y exagerando algún error o debilidad que padezcas. Se convierten en el juez de tu personalidad. Hay otros que solo buscan su protagonismo, minimizando tu rol y haciéndote sentir inferior a ellos.
También están los que utilizan tus secretos o confidencias para sacar provecho. O los que no valoran y hasta desprecian a miembros de tu familia o personas cercanas a ti.
La mayoría hemos padecido en algún momento, de casos de amistades no verdaderas y dañinas. Cuando esto pasa debemos retirarnos. Lo mejor es evitar a este tipo de personas. Una amistad verdadera no puede traducirse en sufrimiento. Un amigo verdadero debe ser parte de tu vida productiva y feliz. Jamás lo olvides!
Te comparto una frase simple pero muy real sobre la amistad: «En la prosperidad nuestros amigos nos conocen. En la adversidad nosotros conocemos a nuestros amigos» Anónimo.
